Javier Fueyo

El piloto Rhys Millen a bordo del auto totalmente eléctrico bautizado como Drive eO, se metió a los libros de historia del automovilismo deportivo el pasado fin de semana al triunfar en la subida al Pikes Peak International Hill Climb. Esta es la primera vez que la clasificación general es obtenida por un auto de propulsión completamente eléctrica; de hecho, el segundo lugar también fue para un vehículo con este tipo de motorización.

Rhys Millen impuso un récord para autos eléctricos en Pikes Peak al finalizar con un crono de 9 minutos 07.222 segundos. Por su parte, el segundo puesto fue para el piloto Nobuhiro Tajima, al volante de Rimac e-Runner, quien necesitó de 9 minutos y 32.401 segundos para completar la ruta.

De cualquier forma, estos registros están lejos del récord de la pista, el cual impusiera en 2013 el piloto francés Sebastien Loeb, con un tiempo de 8 minutos y 13.878 segundos, a bordo de su Peugeot 208 T16 Pikes Peak.

La gente de Drive eO, la compañía de Letonia que desarrolló el auto de Millen, cree que en pocos años y cuando al fin las baterías sean más ligeras, el récord de esta “pista” pasará a ser para un auto eléctrico. El eO PP03 produce 1,386 caballos de fuerza y un torque máximo de 1,593 libras/pie.

Se trata de un auto con arquitectura tubular, carrocería de fibra de carbono y con un peso total de 2,645 libras. Cuenta también con caja reductora, diferenciales con desplazamiento limitado, dirección asistida y amortiguadores ajustables. Puede alcanzar una velocidad de hasta 162 mph.

A continuación el video del recorrido de Millen.