El presidente Mujica no aceptará ninguna oferta por su vocho azul.
En fechas reciente, José Mujica, presidente uruguayo y una de las figuras políticas más emblemáticas de la actualidad, afirmó que no se separará de su viejo Volkswagen, conocido popularmente como Fusca. De acuerdo con diversos medios de comunicación a nivel internacional, el mandatario ha recibido ofertas millonarias a cambio de su humilde vehículo, pero se niega a venderlo debido al profundo cariño que siente por él.
En entrevista con una estación de radio uruguaya, Mujica relató que la Fusca fue un obsequio de un grupo de amigos a través de una colecta, por lo que valor sentimental supera con creces el valor material del vocho. También confirmó que la oferta de U$D1 millón recibida de un jeque árabe fue auténtica.
En palabras del propio Mujica: "Desde siempre somos amigos de los Fusca. Recuerdo el primero que conocí cuando era muchachito en la década del 50. Si lo vendiera, ofendería mucho a ese puñado de amigos que se juntaron para hacernos este obsequio. Hay amigos uruguayos que están exhibiendo por ahí, en las redes, clamando que el Fusca no se vaya del país. Yo no sé si algún día no se va o se va, pero mientras yo viva va a dormir en el galpón y de vez en cuando dará una vueltita".
El Presidente Mujica ha declarado que considerará las ofertas propuestas.