Javier Fueyo

En fechas recientes, Nissan anunció la inauguración de su segunda planta en territorio tailandés. Las nuevas instalaciones permitirán la producción del modelo NP300 Navara, la nueva generación de pickups Nissan que será distribuida en más de 45 países alrededor del mundo. Tailandia es un mercado clave para el fabricante nipón, ya que forma parte de su plan de crecimiento estratégico y comercial en Asia.

Hasta la fecha, Nissan ha invertido más de 3.7 mil millones de Bahts (alrededor de U$D115 mil millones) para la creación de una planta de 580 m2, además de generar 2 mil oportunidades de empleo que han mejorado las condiciones de vida de los habitantes. Cuando la segunda planta alcance máxima capacidad, se espera que produzca más de 150 mil unidades al año.

Fumiaki Matsumoto, Vicepresidente Ejecutivo de Nissan responsable por operaciones globales de manufactura, apuntó: "Tailandia es el motor de nuestro crecimiento en esta región, por lo que estamos entusiasmados por inaugurar la segunda planta que producirá nuestra pickup de última generación. Esta inversión representa nuestro optimismo por esta tierra, la cual surge como un mercado automotriz creciente, un centro de manufactura reconocido por su excelencia y calidad".

Por último, cabe señalar que más de la mitad de los vehículos producidos en esta planta serán distribuidos en otros mercados internacionales.