El siguiente paso es ir a Boneville a intentar imponer una marca de velocidad.
Esta es la clásica historia de dos amigos que comparten una misma idea (locura). Duncan Foster y Phil Weicker, dos ingenieros de California hicieron una súper transformación de un Cadillac 1969 al convertirlo en un jacuzzi con ruedas. Una especie de tina de fibra de vidrio, bombas y filtros instalados en el portaequipajes, y algunos ajustes más, le dieron forma a la idea de Foster y Weicker.
Pero no todo se ha quedado ahí. Ahora la idea es llevar el auto a las salinas de Boneville, Utah, para poder imponer un récord de velocidad. Si quieres conocer más del proyecto y formar parte de él, visita kickstar.com.
Agradecemos el video al canal Newsflarebreaking.
Reconocidos por su infinita belleza, hay que decir que no todos son tan bien parecidos.
Se trata de modelos lanzados en las últimas dos décadas.
A pesar de la gran oferta en el mercado de USA hay autos que no llegarán nunca.