El problema es el gran parecido entre el Thunderbolt y el Vanquish.
Henrik Fisker trabajó como diseñador en Aston Martin y ahora ha sido demandado por ese fabricante inglés. Hace unos días publicamos acerca de que Fisker lanzaba el nuevo Thunderbolt, y al parecer, Aston Martin ha encontrado varios elementos que le dan las armas suficientes para demandar al diseñador danés por plagio (no hay cómo negarlo).
Fisker estuvo empleado por Aston Martin de 2001 y hasta 2004, teniendo bajo su ala modelos tan importantes como el DB9, y dándole una nueva cara a la gama de los súper autos británicos. Tras su paso por la marca, Fisker puso empeño en su propia empresa y pudo presentar el espectacular Fisker Karma, un auto que ya presentaba algunos rasgos similares a algunos de los Aston Martin.
El problema con el plagio del diseño se ha presentado y ya existe una demanda formal en contra de Fisker porque el Thunderbolt tiene varios elementos que remiten de inmediato al Vanquish, como por ejemplo, las tomas de aire en los costados, la parrilla frontal y algo más. El error, por parte de Fisker fue el haberse atribuido el diseño del Thunderbolt, en su totalidad, como propio.
"Él ha tomado uno de nuestro vehículos y ha utilizado nuestras claves de diseño para atribuírselo como propio", según Simon Sproule, portavoz de Aston Martin.
Aston Martin tendrá un stand de lujo en el Salón de Ginebra 2015, en el que el Vantage GT3 estará acompañado del impresionante Aston Martin Vulcan.
Así es y así se comparta el nuevo Aston Martin Vanquish 2015, un auto inglés que combina lo mejor de los dos mundos.