Como todos ya sabréis, el Papa Francisco se distingue por su cercanía con el pueblo y su gran humildad, algo a lo que no estábamos acostumbrados últimamente con los anteriores representantes del Vaticano. Una de las cosas que más llama la atención en sus visitas a otros países, es que siempre prescinde del conocido Papamóvil y solicita un auto lo más económico posible.
En esta línea le pudimos ver en su viaje a Brasil, donde se utilizó por su propia orden un pequeño Fiat para sus desplazamientos, también ha hecho lo mismo en Corea del Sur, donde permaneció del 14 al 18 de agosto de 2014 y solicitó para desplazarse por Seúl un pequeño Kia Soul.
Esta visita no solo ha dado alegrías a sus fieles, también ha sido muy satisfactoria para los directivos Kia, que han visto disparadas las ventas del Kia Soul tras ser usado como “Papamóvil” durante la estancia del dirigente vaticano en el país asiático.
El número de pedidos locales del utilitario coreano ha subido hasta una media de 32,5 unidades diarias del 11 al 20 de agosto, lo que supone un 62,5% más comparado con los registros del mes anterior. Curiosamente en las fechas que El Santo Padre estuvo en este país, fue cuando los pedidos del Soul alcanzaron un pico de 52 unidades.
Desde Kia reconocen que las ventas mensuales de este modelo eran “insignificantes” en su mercado local, y que el aumento de su demanda “tiene mucho que ver con la visita del Papa”. La compañía espera ahora que el cambio de tendencia también se produzca a nivel mundial, elevando así las 139.048 unidades comercializadas entre enero y julio de este año.
Los rumores han quedado atrás.
Los hamsters de Kia están de vuelta para promocionar el nuevo modelo Soul.
El Papa Francisco, como ya es su costumbre, quiso viajar sin excesos.