Luego de varios incidentes, China indicó a Tesla que emitiera un recall para los Model S y X, por posibles rupturas en los brazos de la suspensión. Las unidades fueron fabricadas en los Estados Unidos. Además, les compartimos los llamados a revisión más recientes.
Tesla al fin emitió un recall por un fallo que se ha hecho recurrente… en China. No, no tiene que ver con fascias sueltas, pintura de mala calidad o techos mal asegurados. Ya desde hace meses se han reportado casos de diferentes modelos de la marca con ruidos y hasta daños en la suspensión, el más grave fue el de un propietario suizo de un Model S, que reportó la rotura de un brazo de control cuando circulaba a 200 km/h en la Autobahn. Tesla indicó que fue un incidente causado por el “desgaste natural”, aunque el auto tenía menos de 50,000 millas recorridas.
Al final, el propietario recibió un cheque equivalente a unos 8,300 dólares, aunque otros propietarios le recomendaron piezas de postmercado más resistentes. Se han reportado más problemas, incluso roturas a baja velocidad. El fallo se ha reportado tanto en el Model S como en la Model X o el Model 3. El gobierno chino se ha tomado esto en serio y ha “recomendado” a Tesla emitir un recall para 29.193 unidades de los Model S y X, fabricados entre 2013 y 2018. Tesla minimizó el hecho, indicando que el recall es innecesario, aunque lo haría de todos modos. La firma californiana también indicó que el llamado sólo afectaría a 19,249 unidades.
Los responsables de Tesla –que ya no tiene departamento de relaciones públicas- señalaron que los problemas reportados se deben a abusos de los conductores, al golpear con demasiada fuerza baches o bordillos. Al parecer, el problema se daría por pernos mal ajustados en la suspensión, lo que se solucionaría con un control de calidad más estricto, sin embargo, sabemos que la política de Tesla es automatizar su línea de producción para prescindir en lo posible de manos y ojos humanos.
Hasta ahora, Tesla había tenido una capacidad inusitada de respuesta ante los fallos reportados en sus autos. Los primeros accidentes causados por el Autopilot provocaron la ruptura con su primer proveedor de software, la firma israelí Mobileye; mientras que ante los reportes iniciales de riesgo de daño e incendio en las baterías por golpes en los bajos, se agregó una placa protectora de titanio. Ante los problemas de frenos del Model 3 reportados por Edmunds y Consumer Reports en 2018, se realizó una actualización de Software que solucionó el problema en apenas unos días. Tesla ya ha emitido llamados a sus autos por la dirección (123,000 unidades), el freno de estacionamiento electrónico (53,000), cinturones de seguridad (90,000), adaptadores para sus cables de recarga y, como muchas otras marcas, por bolsas de aire Takata.
Pero al parecer el mayor volumen comienza a pasar factura a Tesla. Esto se suma a los problemas de calidad recurrentes de los Model 3 y Y. Mientras que el Model 3 para China es de producción local, los Model S y X para todo el mundo se fabrican en Estados Unidos, en Tesla no parece que tengan ánimo de replicar el recall a otras regiones del mundo, pero habrá que esperar a si las autoridades correspondientes toman cartas en el asunto. O, como menciona la marca, no es un problema tan extendido.
Hablando de Takata, el recall por las bolsas llegó ya a más de 56 millones de reemplazos, con 17 muertes reportadas en los Estados Unidos en relación con este fallo. El último fallecimiento confirmado ocurrió el 17 de mayo. Lamentablemente, ahora también están bajo investigación los cinturones de seguridad fabricados por el proveedor. Adicionalmente, la NHTSA advierte que aún está en proceso el recall de 1.7 millones de soportes Harbor Freight Tools de 3 y 6 toneladas, que podrían colapsar bajo carga.
En otros llamados, Hyundai emitió un recall global para 77,000 unidades de la Kona EV (11,1367 en Norteamérica), fabricadas entre 2017 y 2020, por un posible riesgo de incendio, luego que se detectaran 13 ejemplares con fuego repentino, incluso estacionados. A decir de LG Chem, proveedor de la marca –y también de GM y Grupo Volkswagen, entre otros- el problema sería del cableado, no de las baterías, aunque también se hará una actualización de software.
Por motivos parecidos, Ford decidió retrasar el inicio de producción Escape PHEV hasta 2021, luego que emitieran un recall para 20,000 unidades de la variante europea Kuga. La Kuga es el vehículo PHEV más vendido de Europa, pero Ford decidió detener las ventas hasta nuevo aviso. BMW también emitió un recall para sus vehículos híbridos conectables Serie 2 Active Tourer, 3, 5 y 7, i8, X1, X2, X3 y X5 y MINI Contryman fabricados en 2020, aunque indicaron que la mayoría de los 26,900 vehículos se ubican en Europa. Ford, BMW y otras marcas como Land Rover tienen el mismo proveedor de baterías: Samsung.
12,799 unidades de las Mercedes-Benz GLE y GLS 2018 a 2020 serán revisadas por un posible fallo provocado por el emblema iluminado de la parrilla. El logo opcional podría causar un desperfecto en el sistema eléctrico, lo que se soluciona revisando la conexión a tierra. No hay incidentes reportados. Los 2,189 Polestar 2 entregados –aún no llega a Norteamérica- reciben un llamado voluntario por un problema de Software. El fallo apaga el sistema propulsor eléctrico, aunque frenos y dirección funcionan con normalidad. No sólo los vehículos eléctricos han tenido que ser revisados, 700,000 F-150, Super Duty, Ranger, Escape, Edge, Expedition, Mustang y Transit 2019-2020 de Ford fueron requeridos por un posible fallo en la cámara trasera. Unos 38,000 Mustang podrían presentar problemas en el pedal de freno.
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