Se acabaron los privilegios de manejo para este escolar chino.
Cuando fuimos jóvenes, la mayoría de nosotros se escabulló entre las sombras de la casa y logró apoderarse de las llaves del vehículo familiar. Ya fuera para visitar a un amigo o a una novia, o simplemente para sentir la emoción del acelerador bajo nuestros pies, la sensación de conducir un automóvil prohibido resultaba una tentación casi imposible de resistir. Algunos logramos cometer la fechoría sin recibir castigos demasiados severos, otros no corrieron con tanta suerte, tal como el protagonista de la presente nota.
En fechas recientes, los entusiastas de los superautos alrededor del mundo sintieron una fuerte perturbación en la "Fuerza", esto cuando un estudiante en China tuvo la mala fortuna de estrellar un Ferrari LaFerrari en una de las autopistas más transitadas de esa nación asiática. De acuerdo con el portal de noticias Car News China, el joven conductor perdió el control de su LaFerrari debido a que conducía a una velocidad imprudente bajo intensas condiciones climáticas. En otras palabras, el mocoso no pudo controlar el poder de este hiperauto bajo una llovizna en una autopista de Shanghai.
Afortunadamente, el conductor sobrevivió al percance sin presentar lesiones graves, pero su buena suerte concluyó cuando el portal de noticias compartió su penosa historia con el resto del mundo. Por supuesto, el vehículo sufrió tantos daños que ahora no es más que los vestigios de lo que alguna vez fue una de las piezas más sofisticadas de ingeniería automotriz sobre la faz de la tierra. De monumento a chatarra en tan sólo unos instantes. Debido a los altos costos de importación, el Ferrari LaFerrari, con un precio habitual cercano a los U$D2 millones, puede tener un precio de hasta U$D3.7 millones en el mercado chino. Considerando lo anterior, es muy probable que este escolar se vea obligado a tomar el autobús por el resto de sus días.
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