Javier Fueyo

Desde que USA se estableció como una nación independiente, libre y soberana, sus habitantes han sentido un profundo respeto y admiración por las organizaciones y los soldados que integran las fuerzas armadas. Ford se cuenta entre los admiradores más fervientes de la milicia norteamericana.

Sin embargo, no se trata de un tema que esté exento de escándalos e irregularidades. Los veteranos de guerra son un sector de la población que gira en torno a la polémica desde hace décadas en USA, ya que algunos opinan que deberían ser apoyados por el gobierno de forma permanente debido a los servicios prestados durante conflictos bélicos, y otros consideran que una vez concluido el servicio militar, no es responsabilidad de las autoridades cuidar de ellos. No hay punto de acuerdo, y tal parece que no surgirá un entendimiento en el futuro cercano.

Ford comprende que se trata de una cuestión sumamente sensible y no cesa en su labor de apoyar las causas que considera justas. Por este motivo, ha donado siete vehículos utilitarios Ford Flex a la organización DAV (Disabled American Veterans), extendiendo y reafirmando un fuerte vínculo que ha brindado asistencia a veteranos discapacitados desde hace 93 años. Entregada hace algunos días, la reluciente flota de modelos Flex pasará a formar parte de la Red de Transporte DAV. Dicho servicio recluta conductores voluntarios para trasladar a veteranos enfermos y/o discapacitados a instalaciones médicas.

Esta donación resultará en un beneficio directo para soldados retirados en lugares como:

*Little Rock, Arkansas

* Iowa City, Iowa

* Iron Mountain, Michigan

* Omaha, Nebraska

* Portland, Oregon

* Salt Lake City, Utah

*Seattle, Washington

Desde 1996, Ford ha donado 199 unidades a la flota de la DAV, esfuerzo que espera mantener durante los años venideros.