Julio Alejandro Saldívar

Fue en el Auto Show de Nueva York 2000 (hace justo dos décadas) donde se presentaba el renovado Chrysler Sebring/Dodge Stratus convertible, un auto que estaba equipado con un motor de última generación de 2.7 litros, V6 y 200 caballos de potencia, y que era un éxito de ventas en su momento.

El Chrysler Sebring fue el descapotable más vendido desde el día de su lanzamiento en 1996 hasta finales de la década de 2000.

A diferencia de la mayoría de los competidores, desde el principio este auto se diseñó para ser un descapotable.

El Sebring convertible mantuvo su gran interior (90 pies cúbicos más 11 pies cúbicos de volumen de carga) y agregó más rigidez estructural para un mejor manejo y una sensación más sólida. La flexión se había reducido en un 44%, según Chrysler.

El motor, que usaba gasolina regular, tenía 200 caballos de fuerza a 5,900 rpm y 192 lb-pie de torque a 4,300 rpm. Incluía un colector de admisión activo para niveles de par utilizables más altos y transmisión AutoStick opcional.

El sistema de encendido eliminó los cables secundarios, colocando bobinas individuales directamente encima de cada bujía. Este sistema de ignición de “bobina en bujía”, combinado con bujías con punta de platino, proporcionó un sistema de ignición sin mantenimiento por 100,000 millas.

El Sebring convertible también tenía un sistema de dirección revisado, un travesaño de suspensión delantera más rígido y nuevos aisladores de barra estabilizadora. Se usó un sistema de suspensión delantera de brazo (SLA) con una suspensión trasera de enlaces múltiples.

Los neumáticos estándar eran P205 / 65R15 de 15 pulgadas en el modelo LX, con neumáticos P205/60R16 opcionales (estándar en LXi y Limited). Un neumático de repuesto de tamaño completo estaba disponible por primera vez. El Sebring fue bien recibido por el mercado americano. Por ejemplo, durante 2000, 2001 y 2002, el Sebring cupé, convertible y sedán, en total vendieron poco más de 100 mil unidades por año.