Sin embargo, el salario fijado para el año pasado fue de 1,4 millones de dólares anuales, que representan 30% menos que en el 2008; porcentaje que fue rebajado por orden expresa de Mulally, como ejemplo para su compañía. Esta será la misma cantidad que reciba el CEO de Ford en 2010.
Adicionalmente, Mulally renunció a bonos en efectivo o en especie y todo tipo de compensación hasta que el fabricante de carros sea totalmente solvente. La misma determinación tomó Mark Fields, el Vicepresidente y presidente para América de Ford, quien tiene un salario de 1,3 millones de dólares, y que obtuvo una compensación por 3,98 millones.
El vicepresidente y gerente financiero de la compañía, Lewis Booth (bajo la misma modalidad de pago), obtuvo 1,2 millones por su salario, mientras que su compensación estuvo enlistada en 3,8 millones.
Es de reconocer la loable labor de este equipo de directivos que ha logrado sacar a flote la compañía sin necesidad de incurrir a préstamos gubernamentales ni a la bancarrota, al mismo tiempo que han sacado una camada de carros que elevan el listón de los fabricantes de este país. Como si fuera poco, "no cobran".
Un superdeportivo de 622 caballos de fuerza que acelera de 0-60 mph en 3.5 segundos.
La nueva Mexican 500 se realizará en Mexicali, Ensenada y San Felipe a finales de septiembre.
La Fórmula 1 corre en Alemania rodeada de escepticismo hacia Pirelli, quien asegura dará buenos productos para que no pase lo de Silverstone.