Por fin la Ford Bronco ha iniciado producción, por lo que las primeras unidades llegarán pronto a los distribuidores, luego de un largo y sinuoso camino para volver a la vida.
El regreso de la Ford Bronco no ha sido ajeno a los tiempos actuales. Primero, por la pandemia, que afectó de manera profunda toda la industria automotriz. Luego, por la escasez de semiconductores, cuya solución apenas comienza a vislumbrarse. Si no fuera suficiente, sumen sus propios problemas con proveedores, en especial el de la capota removible. El lanzamiento original estuvo planeado para inicios de la primavera, pero a punto de entrar el verano, la buena noticia es que las Ford Bronco de dos y cuatro puertas por fin han iniciado producción.
Presentada hace 11 meses, hemos tenido que aliviar un poco la espera por la Bronco “mayor” de producción con su hermana de acceso, la Bronco Sport. Pero si quieren los mejor de lo mejor de Ford para trepar rocas (la F-150 Raptor es más para ir a toda velocidad en las dunas), la Bronco basada en la Ranger es la opción. No en balde, el nombre no regresó como ha ocurrido en otros casos, adornando una carrocería monocasco más familiar; no, la Bronco ha salido de la congeladora con el único propósito de hacer mella al que, hasta ahora, es el todoterreno americano por excelencia: el Jeep Wrangler.
La Ford Bronco ha estado en pausa por 25 años antes de volver a las líneas de producción. Durante ese tiempo, fue relevada por modelos de corte más familiar, como la Explorer y la Expedition. A pesar de ello, desde 2004 la marca tuvo siempre sobre la mesa el proyecto para volver a traer a la vida a la Bronco. Sin embargo, las crisis financieras y petroleras impulsaron a Ford a poner su dinero en vehículos más pequeños y eficientes, como el Fiesta o el Focus. Sin embargo, el gusto de los consumidores migró rápidamente hacia Crossovers y pick-ups, de modo que la marca ha ido finiquitando sus autos en Norteamérica, salvo el imperecedero Mustang.
Ahora, la estrategia de la marca va por mantener los modelos exitosos y con una fuerte imagen, como los mencionados Mustang o Explorer, además de su campeona en ventas, la F-150. Su estrategia de renovación se desdobló en dos frentes: primero, la electrificación, con la Mustang Mach-E, que tomo “prestado” el nombre del Muscle Car para tener un nombre y una apariencia deportivos, aunque con propulsión eléctrica. La segunda parte contempló el regreso de la Ranger, cuyas variantes a diésel se mantenían con relativo éxito en mercados internacionales.
La Ranger volvió, con una estética revisada y un motor EcoBoost. A la par de ello, la Ford Bronco regresaría a producción, ahora sobre la base de la mencionada pick-up mediana. Aunque la Bronco original tomó la base de la Serie F de la época, el “gigantismo” paulatino ayuda a la SUV todoterreno a mantener medidas parecidas a sus antecesoras: 174.8 vs. 183.6 pulgadas (4.44 vs. 4.66 m) de largo, 79.3 vs. 79.1 pulgadas (2.014 vs. 2.01 m) de ancho; esto, en variantes de dos puertas, comparando contra la quinta generación (1992-1996). Aunque el diseño es retro, se priorizó el espacio interior, esto, contra el Wrangler (4.23 m de largo, 1.87 m de ancho, modelo de dos puertas).
La producción de la Ford Bronco, en variantes de dos y cuatro puertas, se lleva a cabo en la planta de montaje de Wayne, Michigan, junto a la Ranger. Justo en esa misma planta también se fabricaron las cinco generaciones previas de la Bronco. Para esta nueva SUV, Ford realizó en el complejo una inversión de 750 millones de dólares para su acondicionamiento, a la par que se agregaron 2,700 nuevos puestos de trabajo. Si no es suficiente, se estableció un centro de 1.7 millones de pies cuadrados, aledaño a la planta, que se encargará de las modificaciones y las piezas de personalización para el modelo.
Luego de iniciar producción, las primeras unidades de la Ford Bronco ya están llegando a los concesionarios, con precios MSRP que inician en los $ 29,995 USD. La SUV todoterreno acumula ya 190,000 reservaciones. Se puede pedir con un motor de cuatro cilindros 2.3 l EcoBoost, con 270 hp y 310 lb-pie; o un V6 2.7 l de 310 hp y 400 lb-pie de par. Además de la caja automática de 10 velocidades de Ford, también estará disponible una transmisión manual de siete velocidades, aunque sólo para el L4.
“Sabemos que los fanáticos han estado esperando la Bronco, y estamos muy emocionados de traerla de vuelta“, dijo Suzy Deering, directora de marketing de Ford. “Y esta Bronco está mejor que nunca. Nos mantenemos auténticos con el legado de Bronco que recorre cualquier terreno y hemos aprovechado el diseño innovador Built Wild de la marca, la durabilidad y la capacidad todoterreno avanzada para aprovechar al máximo cada aventura en la naturaleza”.
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