Javier Fueyo

Son varias cosas las que hay que tener en cuenta para elegir un buen habitáculo: debes tener una posición de conducción adecuada, los principales controles a la mano, botones atractivos a la vista y de buen tamaño, cuadro de instrumentos fácilmente legible y que no te distraiga, acabados de buena calidad y sillas cómodas, tener una visibilidad como menos aceptable hacia el exterior y que tenga un diseño armónico y atractivo. Siendo así, estos son los 15 modelos sedanes y hatchbacks que hemos elegido.

Audi A8: Audi se ha ganado el aprecio de muchos gracias a sus cabinas bien hechas, aunque en algunas ocasiones pecan por exceso de instrumentos. Este no es el caso del A8, donde todo está en su lugar, su diseño es sobrio y elegante y combina muy bien lo clásico con lo moderno. Este auto que empieza en $74,050 dólares tiene múltiples opciones para su configuración interior, pero cuando se elige el paquete Alcantara se ve sencillamente espectacular. Existe una versión alargada, A8L, que tiene tanto espacio en la cabina que podría pelear con un Rolls-Royce Phantom, donde además está plagados de finos detalles.

Buick LaCrosse 2010: El nuevo LaCrosse promete marcar la diferencia entre el pasado y futuro de Buick. General Motors le ha puesto propulsores eficientes, y ha diseñado un exterior muy bonito, que hace juego con su llamativo habitáculo. En cuanto a diseño, logra mezclar ideas muy modernas y vanguardistas con el clásico gusto del comprador de Buick, pero además, se nota muy americano. Todo está a la mano, y aunque en una primera vez es poco intuitivo, en unos minutos ya estás familiarizado con el auto. Los acabados son de primera, al nivel de un Cadillac, y la iluminación interior azul le da un toque de juventud.

Cadillac CTS: Gracias al CTS, Cadillac ha ido recuperando terreno y está siendo reconocida nuevamente como una marca verdaderamente Premium. Este sedán que arranca en $37,585 dólares tiene la particularidad de ser de tamaño medio (e incluso medio), pero al ocupar una de sus cómodas sillas, te sientes en un auto grande y muy lujoso. Sin duda el CTS es el auto para pasear con clientes y dar impresión de buen gusto pues la combinación de colores (cualquiera que sea) está bien pensada, aunque la disposición de los instrumentos es más inteligente. Si no te enamoró el precio o la carrocería, el interior lo hará, pues es tan versátil que puede ser de una limusina chica, o el de un deportivo temible, como es el CTS-V.

Hyundai Genesis sedan: El cambio de calidad que ha tenido Hyundai es sencillamente impresionante. Hace años que estaban haciendo maquinarias muy confiables y de excelente relación precio/producto, pero pecaban con interiores desabridos. Con el nuevo buque insignia de la marca esto no sucede. Por poco más de 32 mil dólares se recibe un potente motor V6 (V8 en opción) y una cabina tan espaciosa como la de un BMW Serie 7, pero la oferta se hace mas atractiva al palpar los materiales: no hay ninguno barato. Tiene muchísimo equipamiento, pero su interior no peca por exceso de botones, y además todos los controles están muy bien puestos a la vista y al tacto. Se ve lujoso, bien pensado, costoso y atractivo.

Jaguar XF: Perfectamente podría ser el ganador de esta disputa. Jaguar hizo un cambio extremo en su sedán medio, sacando al mercado un auto supremamente atractivo con un interior espectacular y novedoso. En primer lugar está cargado de tecnología, por ejemplo, para abrir la guantera no hay que pulsar ningún botón, el calor de tu dedo lo hace. Hecho con madera real y cuero de estupenda calidad, el nivel de lujo es similar al de autos muchos más caros, pero además es de los interiores mejores pensados, donde tienes pocas cosas a la vista, pero todo a la mano. Instrumentos mimetizados en el aluminio cepillado, una inmensa pantalla LCD central y un cuadro de instrumentos fácil de leer son para muchos, una carta de amor para ellos escrita por Angelina Jolie.

Lexus IS: Lexus probablemente tenga la mejor cabina de los sedanes compactos de lujo. El IS es típicamente japonés en su diseño: sobrio, inteligente y de buena calidad, pero al mismo tiempo tiene todo lo que enamora a los americanos: equipamiento, diseño espectacular y combinaciones de colores y materiales sencillamente exquisitas. El IS250 es el modelo base (31,205 dólares), y a partir de este hasta el impresionante IS-F (56,760), cualquiera que entre o conduzca este auto saldrá cautivado por su interior. Todo es intuitivo, fino, agradable, pero además la insonorización está en el punto perfecto, y es del saber común que los asientos de un Lexus son espectaculares.

Lexus GS: Este sedán de tamaño medio, lanzado como modelo 2006 se ha convertido en el referente de la categoría en cuanto a interiores. La razones son simples (pero complicadas de lograr): la ubicación de sus altavoces es exquisita, utiliza materiales de primera categoría, mezcla el cuero, la madera y el aluminio de la mejor forma, y en general nos hace sentir muy a gusto cuando nos encontramos a bordo, pero además todo está ubicado de manera intuitiva. El espacio de la cabina, si bien no es el campeón en la categoría, si es estupendo. Cuando nos encontramos en la variante híbrida GS450h, se resalta el funcionamiento de sus elementos como el aire acondicionado: silencioso y eficaz.

Lincoln MKS: Este auto de 41 mil dólares levanta el listón del Ford en cuanto a interiores. Sus materiales y confecciones están al nivel de las casa japonesas Premium, mientras que su diseño típicamente americano, desbordante de equipamiento y lujo, lo convierte en uno de nuestros favoritos. No se trata de un diseño limpio como el de un Mercedes-Benz, pero todo está a la mano y ubicado tal y como le gusta al estadounidense. Su impresionante espacio interior se deja apreciar muy bien gracias al sabor retro impreso por Lincoln, que además lo hacen único en el mercado. Las combinaciones de colores y materiales posibles están muy bien elegidas.

Mazda3: El nuevo Mazda3 tuvo un cambio estético radical que debutó se presentó en Los Ángeles 2008, y desde ese entonces se ha hecho énfasis en que la mejora más notoria ocurrió en el interior del auto. Y verdaderamente fue así. Sin lugar a dudas tiene el mejor habitáculo entre los compactos (a pesar de que no tiene los materiales más finos), y esto es porque la combinación de tonos no da pie a que sea monótono, mientras que los elementos están dispuestos de manera ergonómica, y en conjunto es un tablero moderno. El cuadro de indicadores es fiel a la tendencia ‘zoom-zoom’, y en general nos encontramos frente a una cabina deportiva pero clásica.

Mazda6: El sedán tope de Mazda también recibió hace poco una renovación profunda. Por $19,920 dólares accedemos a una cabina un tanto menos espaciosa que la de un Toyota Camry o un Honda Accord, pero la del Mazda6 tiene un acento deportivo muy agradable. No es un auto que combine tapicería en cuero beige con madera de nogal para ir con los ejecutivos, sino con cuero negro y apliques jaspeados para ir con la familia, a la oficina y a divertirse. Es una cabina que sin duda te hace sentir en el 2010 por la inteligencia, la tecnología, el equipamiento y el diseño emocional que los ingenieros y diseñadores de Mazda han puesto en este modelo.

Maserati Quattroporte: El mejor sedán de Italia, que fue diseñado por Pininfarina bajo los requerimientos de Maserati, nos enseña una exquisita combinación de maderas, colores, cueros de calidad inigualable, e incluso fibra de carbono. De seguro no hay dos Quattroporte iguales en el mundo, pero sea cual sea siempre destacarán sus tapizados (probablemente los mejores de la categoría). El estilo es único y típico de la bota itálico, siempre acentuando la deportividad y la tecnología. Los botones no están tan bien dispuestos como en un Lexus LS o un Mercedes S, pero se entiende porque aquí todo gira en torno a la estética.

Mercedes-Benz CLS: Es cierto que lo más innovador del CLS es su concepto de un coupé de cuatro puertas, que actualmente está en furor. Pero cualquier carrocería se refleja en el habitáculo, así que dentro del auto todo es diferente. Hay sólo cuatro puestos, y tanto adelante como atrás hay controles de muchas funciones y toda la comodidad posible, además de unos asientos muy cómodos. Este auto de 70 mil dólares puede ser un elegante sedán egoísta y envidiable que exuda lujo, o que transmite deportividad según la versión (CLS550 o CLS63 AMG respectivamente). El diseño es clásico, sobrio y a la vez vanguardista gracias a sus materiales.

Mercedes-Benz Clase S: Es ganador del trío que comparte con el BMW Serie 7 y el Audi A8 (desde hace muchos años) por varias razones, de las cuales inevitablemente está el interior. Este habitáculo no se parece al de ningún otro auto en el mercado, pero además tiene una combinación extraordinaria de madera-cuero-aluminio. El diseño es sobrio y sencillo, alejado de excesos y muchos botones, sin embargo tiene una lista interminable de equipamiento. Con pocos botones controlas todo el auto, e incluso puedes hablar con él. Una moderna pantalla LCD y un cuadro de instrumentos digital (y que cambia según el gusto del conductor) contrasta perfectamente con un reloj análogo clásico.

Volkswagen Passat CC: El coupé de cuatro puertas más barato del mercado (arranca en 27 mil dólares con el motor 2.0TSi) aplica todas las ganas de VW por ofrecer interiores excepcionales. En cuanto a calidad está casi al nivel de Audi (su hermano más cercano) o BMW, mientras que por diseño deja claro que es alemán: todo a la mano, sobrio y de buen gusto. No peca en excesos ni en simplicidad. Viene en dos acabados: Sport y Luxury, donde se nota la diferencia en vocación; en el primero encontramos sillas tipo cubo de muy buena calidad y aluminio cepillado por doquier, mientras que en el segundo el ambiente es más elegante, pero sigue siendo juvenil y descomplicado.

Volvo S80: El sedán más grande de la casa sueca, que arranca en $39,600 dólares, mejora el característico diseño que implantó el S40 con el ‘tablero flotante’, es decir, los mandos del radio y aire acondicionado están unidos por un ‘paral’ pequeño que permite separarse del resto con habitáculo, otorgando espacio adicional y sensación de amplitud. La cabina es única por ese motivo, pero también porque bastan 5 minutos para estar familiarizado con todos los mandos. La sencillez del diseño escandinavo encuentra su mayor atractivo con la combinación de colores y terminaciones. El conjunto es clásico y moderno y no disgusta a nadie.