Javier Fueyo

Cuando el estado de California le dio el “sí” a la normativa que obliga a todas las marcas de autos que quieren poner a la venta sus modelos en dicho estado, deberán contar con uno de ellos que sea totalmente eléctrico. Y aunque ya se sabía que con esta medida las armadoras estarían perdiendo dinero con cada eléctrico que vendieran, no había forma de omitir dicha legislación. Por su parte, Fiat se decidió por el Fiat500 para crear la variante eléctrica.

Sergio Marchionne, CEO de Fiat Group, Fiat Group Automobiles y Chrysler Group LLC, decidió llevar el 500 eléctrico a sólo algunos estados de los Estados Unidos, ante el hecho de, según en ese momento, perder alrededor de 10 mil dólares por cada modelo de estos vendido. Sin embargo, la cosa no se detuvo ahí, Marchionne ha declarado en una conferencia de manera honesta y sincera que por favor no compren el 500e ya que la compañía pierde, al menos, 15 mil dólares por unidad vendida. El directivo agregó que la única marca que no pierde dinero vendiendo autos eléctricos es Tesla.

Sergio Marchionne comentó también que él cree que sería más sencillo que el gobierno estadounidense estableciera una ley federal de emisiones, con un objetivo en reducción de CO2 anual, en lugar de tener que cumplir requerimientos como los californianos. Además, comentó que "la mitad, si no son dos terceras partes, de las ventas de Chrysler en Estados Unidos en 2025 serán de coches híbridos".

Lo que nos resulta un poco chocante es que haya ese tipo de regulaciones para autos que dejan claro que pueden revolucionar la ecología mundial, y no así con modelos hechos en EEUU y los cuales consumen galones y galones de combustible. Las contradicciones a la orden del día.